Cómo pedir comida en Nueva York
Cuando viajas al extranjero siempre resulta un poco complicado adaptarte a hábitos culinarios diferentes a los nuestros y Nueva York no es una excepción.
De hecho, los americanos tienen una dieta muy colorida, resultado de diferentes combinaciones multiétnicas, y horarios distintos a los que estamos acostumbrados: ¡a las 11 de la mañana por ejemplo ya podías encontrar los restaurantes llenos!
Descubramos cómo es un día típico de los neoyorquinos en la mesa y cómo pedir comida en Nueva York.
Comer en Nueva York: ¿a qué hora se come?
El día típico de los neoyorquinos generalmente incluye tres comidas principales: desayuno, almuerzo y cena (supper, si es ligera y rápida, o dinner, si incluye una comida completa con varios platos).
El desayuno es una de las comidas más importantes y es muy sustancioso porque incluye: leche con cereales, tostadas con mantequilla y mermelada, zumo de naranja, huevos fritos, tocino frito, salchichas, tortitas con sirope de arce, té o el imperdible café largo.
Si pides café en un lugar, te traerán directamente café americano, a menos que especifiques el tipo de café. Esto puede ser:
- espresso;
- con crema batida (whipped cream);
- con espuma (foam);
- frío o congelado (chilled);
- o descafeinado (decaf).
En cambio, el almuerzo se considera una comida secundaria, más ligera que el desayuno y la cena, que a menudo se toma en el trabajo e incluye una pausa con algunos alimentos que a menudo se preparan en casa, como un sándwich, seguido de yogur y fruta.
A diferencia del anterior, el brunch (descubre los mejores lugares para tomar un brunch) se prepara con más cuidado y se consume al final de la mañana, especialmente en días festivos o en ocasiones formales o durante comidas de negocios.
En la práctica es una mezcla entre el desayuno y el almuerzo, y combina tanto los alimentos del desayuno como el yogur y la fruta del almuerzo.
Sin embargo, como ya he dicho, la cena puede ser informal y apresurada (supper) o completa con todos los platos principales y consumirse con tranquilidad (dinner).
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Comer en Nueva York: pequeño manual de supervivencia en el restaurante
La Gran Manzana también es famosa como “la ciudad que nunca duerme” y, de hecho, podrás encontrar multitud de restaurantes abiertos a cualquier hora del día o de la noche: así que cualquier momento será el indicado para sentarte y disfrutar. los placeres de la buena comida.
Entonces, veamos cómo pedir comida en Nueva York.
Agua y otras bebidas
Primero, cuando ingresas a un restaurante, tendrás que esperar a que alguien te acompañe a tu mesa.
Inmediatamente después vendrá otro camarero y te preguntará qué te apetece beber y aunque no lo preguntes, casi seguro que te traerá vasos grandes con agua y hielo (agua del grifo o tap water).
Si quieres agua con gas, pide sparkling water, si prefieres agua natural, entonces simplemente tendrás que decir still water.
En cuanto a otras bebidas, por ejemplo cócteles, si las quieres con hielo deberás especificar «on the rocks» o «a bit of ice» (con un poco de hielo). Sin embargo, si te refieres a cosas específicas, como una cubeta de hielo, necesitarás utilizar «on-ice».
Cómo pedir comida
Después de elegir el tipo de agua, pregunta por el menú (“¿Can I see the menu, please?”).
El menú
Al leer el menú, encontrarás algunos elementos que probablemente no te resultarán muy familiares.
Es bueno saber que el almuerzo o la cena comienza con los aperitivos, estos se llaman appetizers o starters.
Los platos principales son los siguientes: los “main course” y los “sides”, que suelen acompañar a los platos principales (quesos y lácteos en general, los encontrarás bajo el epígrafe de lácteos) y finalmente los postres.
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Sin embargo, cuando pidas algo, prepárate para recibir al menos tres o cuatro preguntas más seguidas por cada plato que elijas.
Carne
Cuando pidas tu carne te preguntarán qué tipo de cocción prefieres:
- rare (es decir, al sangre);
- medium (cocción media);
- well-done (bien cocida, usualmente solo para carnes blancas);
- raw (prácticamente cruda, requerida para algunos tipos de carne).
La guarnición de carne siempre está incluida, por lo que si pides un filete seguro que te preguntarán si quieres acompañarlo con la sopa (una especie de caldo con verduras y pasta) o con la ensalada.
Ensaladas
También para la ensalada te podrán preguntar si la prefieres grande (full-size) o media (half-size), y el tipo de aliño (dressing).
Los dressing representan el condimento, generalmente salsas de todo tipo, y si prefieres evitarlos, hazlo saber inmediatamente (“aliñar aparte” – sin condimento).
Los huevos
En Nueva York los preparan de muchas formas diferentes y los puedes encontrar en todos los bares y restaurantes. Allí están los:
- sunny-side up special (huevo frito colocado sobre una rebanada de pan tostado, una rebanada de queso cheddar y tocino crujiente picado);
- american egg scramble (huevo con cebolla, tomate, queso pimiento, todo revuelto en una sartén);
- bread crumb e bacon bit scramble (tocino, pan rallado, aceite, huevos, leche, queso, sal y pimienta);
- cheesy eggs on toast (huevos revueltos y queso rallado colocados sobre tostadas).
La factura
Al final de la comida, tendrás que pedir la cuenta preguntando “¿Could I have the check, please?” (¿me puede dar la cuenta por favor?).
Si tienes intención de pagar con tarjeta de crédito, simplemente diga «¿Can I pay by card?» (¿Puedo pagar con tarjeta de crédito?) o “¿Do you take credit cards?” (¿Aceptan tarjetas de crédito?).
Comer en Nueva York: ¡dar propina es imprescindible!
Un debate aparte se refiere a la cuestión de las propinas, que en Nueva York son absolutamente obligatorias y que generalmente representan alrededor del 15-20% de la factura.
La forma más sencilla de dejar la cantidad justa es duplicar el importe de los impuestos (alrededor del 8,25%), que a su vez nunca se incluyen.
Casi todos los camareros de Nueva York, en su mayoría estudiantes que trabajan para financiar sus estudios, reciben un salario básico bastante bajo porque sus ingresos reales se basan en las propinas recibidas.
Por eso, nunca abandones el lugar sin dejar propina, ya sea un bar o un restaurante, porque es parte integral del servicio que te ofrecen: no es una regla escrita (al menos no en todos los lugares) pero es parte de los buenos hábitos de Nueva York.
